Un grupo de estudiantes de la Institución Educativa San Rafael de Chucurí, sede Campo Galán, participó recientemente en una jornada especial del programa Delinquir No Paga. Esta iniciativa, liderada por la Subsecretaría de Seguridad Ciudadana, busca sensibilizar a los jóvenes sobre las consecuencias de involucrarse en actividades delictivas. La visita al centro penitenciario de mediana seguridad de Barrancabermeja fue una oportunidad para que los estudiantes conocieran de primera mano la realidad que enfrentan las personas privadas de libertad y reflexionaran sobre la importancia de tomar decisiones correctas.
Estrategia para la Convivencia y la Cultura de Paz
El programa Delinquir No Paga es una de las estrategias clave para fomentar la convivencia pacífica en la región. A través de este tipo de iniciativas, el objetivo es prevenir que los jóvenes se involucren en actos delictivos y, al mismo tiempo, fortalecer una cultura de paz en la comunidad. La participación de los estudiantes en estas actividades busca crear conciencia sobre las repercusiones de las malas decisiones, y mostrar la importancia de vivir conforme a los valores y principios.
Durante la visita, los estudiantes participaron en diversos talleres y charlas organizadas por un equipo multidisciplinario de expertos en pedagogía, psicología y seguridad. Estas actividades, diseñadas para ser interactivas, permitieron a los jóvenes no solo escuchar, sino también reflexionar sobre cómo la delincuencia puede afectar tanto la vida de una persona como su entorno familiar y social.
Visita al Centro Penitenciario de Barrancabermeja: Impacto en los Estudiantes
El recorrido por el centro penitenciario fue uno de los momentos más impactantes para los estudiantes. Durante su visita, no solo pudieron observar las condiciones en las que viven las personas privadas de libertad, sino que también entregaron kits de aseo como parte de un gesto humanitario. Este tipo de acciones refuerzan en los jóvenes la importancia de la empatía y la solidaridad hacia los demás.
A través de las charlas impartidas por los expertos, los estudiantes comprendieron cómo decisiones erróneas pueden llevar a consecuencias devastadoras, no solo para el individuo, sino para toda la comunidad. El programa Delinquir No Paga busca precisamente evitar que los jóvenes caigan en el mismo camino que muchas personas recluidas en el centro penitenciario han recorrido.
Colaboración entre Instituciones para una Mejor Convivencia
Uno de los aspectos más destacables del programa Delinquir No Paga es su enfoque en la colaboración interinstitucional. Varias entidades públicas y privadas participan activamente en esta iniciativa para asegurar un impacto positivo en la comunidad. Entre ellas se encuentran el Ministerio Público, representado por la Personería, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), las comisarías de familia, y el centro de convivencia ciudadana. Todas estas instituciones trabajan en conjunto para ofrecer a los jóvenes alternativas que los alejen de la delincuencia.
Subsecretaría de Seguridad Ciudadana y su Rol en el Programa
La Subsecretaría de Seguridad Ciudadana es una de las entidades clave en la implementación de este programa. A través de sus esfuerzos, se ha logrado llegar a diversas instituciones educativas de la región, promoviendo una mayor conciencia entre los jóvenes sobre los peligros de la delincuencia. Además, la Subsecretaría coordina con otras entidades para asegurar que la comunidad educativa esté plenamente involucrada en la promoción de una cultura de paz y convivencia.
Apoyo de la Personería y el ICBF
El papel de la Personería y del ICBF en este programa es fundamental. Ambas instituciones velan por el bienestar y los derechos de los niños, niñas y adolescentes, asegurando que estas iniciativas se enfoquen en educar y proteger a los jóvenes. Además, su presencia en el programa Delinquir No Paga fortalece la legitimidad de las acciones y brinda un respaldo institucional que resulta crucial para la implementación efectiva de estas estrategias en las comunidades.
Reflexiones de los Estudiantes tras la Visita
Al finalizar la visita, los estudiantes tuvieron la oportunidad de compartir sus reflexiones sobre la experiencia vivida. Muchos de ellos manifestaron lo impactante que resultó ver las condiciones en las que viven las personas privadas de libertad. Esta experiencia no solo les permitió valorar más lo que tienen en sus hogares, sino también reflexionar sobre las decisiones que toman en su vida diaria.
Uno de los objetivos principales del programa Delinquir No Paga es precisamente este: generar un cambio de mentalidad en los jóvenes, para que comprendan que cada decisión tiene una repercusión. La visita les permitió ver de cerca las consecuencias de las malas decisiones y la realidad que enfrentan aquellas personas que han elegido el camino del delito.
Gracias a esta iniciativa, más de 200 estudiantes de la región ya han sido sensibilizados sobre la importancia de construir un proyecto de vida basado en valores, principios y buenas decisiones. Los colegios participantes incluyen instituciones como el Técnico Superior de Comercio y el Camilo Torres Restrepo, quienes también han tenido la oportunidad de involucrarse en el programa.
Con estas acciones, las autoridades locales esperan no solo reducir las tasas de criminalidad en la región, sino también sembrar en los jóvenes las semillas de una convivencia pacífica y una vida basada en la toma de decisiones responsables.