Huecos en la carrera 36 de Barrancabermeja generan accidentes y preocupación vecinal

La comunidad denuncia el deterioro de la vía

En los últimos días, la situación de la los huecos en la carrera 36 de Barrancabermeja ha encendido las alarmas de la comunidad. Los constantes accidentes que se han registrado en esta transitada vía, especialmente los ocurridos durante el pasado fin de semana donde dos motociclistas resultaron lesionados, han puesto en evidencia un problema que se venía denunciando desde hace meses: los huecos que crecen día a día y se convierten en trampas mortales para conductores y peatones.

Los habitantes de la zona aseguran que la falta de mantenimiento ha deteriorado gravemente la vía, afectando tanto la movilidad como la seguridad de quienes transitan por el sector. Para muchos vecinos, se trata de un problema crónico que ha sido ignorado por las autoridades locales durante demasiado tiempo

Testimonios de los habitantes afectados

Vecinos de la carrera 36 han manifestado su inconformidad ante los medios locales. Con frustración, señalan que no solo se trata de un inconveniente estético o de incomodidad al circular, sino de un verdadero riesgo para la vida.

“Es increíble ver las calles de Barranca tan deterioradas. Los huecos se agrandan cada día y provocan accidentes que podrían evitarse con un mantenimiento adecuado. ¿Quién responde por las familias afectadas?”, expresó un residente indignado.

Otro habitante aseguró que el problema no solo afecta a quienes se desplazan en vehículos: “Uno sale a pie y termina salpicado por el agua estancada en los huecos cuando pasa un carro o una moto. Es algo que sufrimos todos, no importa si somos peatones, conductores o pasajeros”.

Accidentes recientes que encendieron las alarmas

Los accidentes del fin de semana fueron la gota que colmó el vaso. Dos motociclistas sufrieron graves lesiones al caer en los huecos de la carrera 36, lo que generó aún más indignación en la comunidad.

De acuerdo con testigos, las llantas se hunden en los cráteres de la vía y los vehículos pierden el control. Esto representa un riesgo no solo para los conductores, sino también para quienes se encuentren cerca.

La carrera 36 de Barrancabermeja es una arteria vial utilizada diariamente por cientos de personas, tanto residentes como trabajadores que se trasladan desde otras zonas. Por ello, el deterioro ha adquirido una dimensión de emergencia ciudadana.

Acciones de la Secretaría de Infraestructura

Frente a la creciente presión ciudadana, la Secretaría de Infraestructura del distrito respondió con un plan de intervención que busca dar una solución temporal a la problemática. Durante la tarde del mismo fin de semana en que se registraron los accidentes, funcionarios y maquinaria llegaron a la zona para iniciar labores de reparcheo.

Plan de reparcheo en la carrera 36

Según las declaraciones de la entidad, los trabajos en la carrera 36 hacen parte de un proyecto más amplio que pretende mejorar y mantener la malla vial en diferentes comunas del distrito. La intervención consiste en tapar los huecos más peligrosos con pavimento flexible en caliente, con el objetivo de prolongar la durabilidad de las reparaciones.

Un vocero de la Secretaría explicó: “Hoy iniciamos en la carrera 36, donde tenemos una problemática evidente. Nuestra idea es tapar varios huecos que comprometen la seguridad de la comunidad y así permitir un tránsito más seguro”.

No obstante, algunos habitantes consideran que estas obras son solo un paliativo y no resuelven de raíz la situación. “Siempre hacen lo mismo: vienen, tapan por pedacitos y al poco tiempo los huecos vuelven a aparecer. Necesitamos una intervención estructural y duradera”, afirmó una vecina.

Otros puntos críticos de Barrancabermeja en la agenda

Además de la carrera 36, la Secretaría anunció que otros sectores entrarán en el plan de reparación vial, como la Circunvalar y el intercambiador. En estos lugares se aplicará pavimento denso en caliente, una técnica que, según los ingenieros, ofrece mayor resistencia al tráfico pesado y al paso del tiempo.

El intercambiador, en particular, es considerado uno de los puntos más críticos. Aunque hace unos meses se ejecutó un reparcheo provisional, las autoridades reconocen que es necesaria una intervención completa para evitar más accidentes.

Exigen soluciones estructurales y duraderas

La comunidad de Barrancabermeja insiste en que el problema no se solucionará con medidas temporales. Para los vecinos, la respuesta de las autoridades debe ir más allá de los parches. La seguridad vial requiere proyectos integrales que garanticen la estabilidad de las calles a largo plazo.

El llamado de la ciudadanía a la Alcaldía

Los residentes piden a la Alcaldía Distrital que no se limite a reparaciones aisladas, sino que ejecute una intervención de fondo que cubra toda la vía. Además, solicitan que los recursos se inviertan de manera eficiente y que los proyectos no queden en promesas.

“Cada vez que ocurre un accidente, vuelven con el mismo discurso. Queremos soluciones reales, no simples reparcheos que solo duran unos meses. La vida de las personas no puede depender de un hueco mal tapado”, aseguró un líder comunitario.

Más allá de los reparcheos: la necesidad de seguridad vial

La preocupación de los habitantes no solo está centrada en los huecos. También denuncian que la falta de señalización, la iluminación deficiente y el desorden en la movilidad agravan la situación. En conjunto, todos estos factores convierten a la carrera 36 en una vía de alto riesgo.

Expertos en movilidad señalan que una estrategia integral de seguridad vial debe contemplar varios elementos: pavimentación de calidad, señalización adecuada, campañas de educación ciudadana y controles estrictos para prevenir accidentes.

La ciudadanía también reclama un mayor compromiso en la supervisión de las obras, ya que consideran que la baja calidad de algunos trabajos pasados ha contribuido al rápido deterioro de las calles.

Conclusión: un problema que requiere compromiso a largo plazo

El deterioro de la carrera 36 de Barrancabermeja es un reflejo de la situación que atraviesan muchas vías en la ciudad. Los huecos no solo dificultan la movilidad, sino que también ponen en riesgo vidas humanas. Los recientes accidentes han demostrado que no se trata de un problema menor, sino de una situación urgente que exige soluciones inmediatas y duraderas.

Las acciones de la Secretaría de Infraestructura representan un primer paso, pero la comunidad espera que no se queden en simples parches. Los habitantes piden un verdadero compromiso por parte de las autoridades para transformar las calles en espacios seguros, dignos y funcionales.

La ciudadanía seguirá vigilante, esperando que sus denuncias sean atendidas y que la seguridad vial se convierta en una prioridad real en la agenda de la administración local.