Varias mujeres del sector de la playa en el municipio de Betulia, Santander, fueron desplazadas de su lugar de trabajo cerca de la hidroeléctrica Sogamoso de Isagen. Durante años, estas mujeres se han dedicado a la venta de pescado en una vía clave que conecta Barrancabermeja con Bucaramanga. Sin embargo, según ellas, fueron obligadas a abandonar sus puestos por la alcaldía y la Ruta del Cacao debido a que supuestamente estaban invadiendo parte de este eje vial.
Mujeres Desplazadas: Reclamos de las Vendedoras
Reubicación Forzada y Compensación Insuficiente
Las vendedoras afectadas expresaron su frustración y angustia al ser desplazadas sin una solución laboral adecuada. A pesar de recibir una indemnización de 5 millones de pesos, consideran que esta cantidad no compensa los años de trabajo y dedicación en la zona.
“Denos trabajo que la Ruta del Cacao nos dé trabajo a nosotros,” exclamó una de las afectadas, subrayando la necesidad urgente de empleo para mantener a sus familias.
La Indemnización: Una Solución Insuficiente
Inconformidad con la Compensación Económica
Aunque algunas mujeres recibieron la indemnización, otras no han visto un solo peso de esta compensación. Las vendedoras coinciden en que 5 millones de pesos no son suficientes para cubrir sus necesidades básicas ni para compensar los años de trabajo que han dedicado.
“Póngase usted a pensar, 5 millones de pesos para tantos años de trabajo… ¿Con eso usted va a vivir el resto de la vida? A mí me parece que no,” comentó otra afectada.
La Intervención de la Alcaldía y la Ruta del Cacao
Conflicto y Esperanza de una Mesa de Trabajo
El alcalde de Betulia señaló que las mujeres fueron notificadas por la Agencia Nacional de Infraestructura (ANI) y que próximamente se realizará una mesa de trabajo con esta entidad para buscar soluciones.
“Toda la vida han insistido las vendedoras en ese sector. Cuando llega la Ruta del Cacao, compran las áreas, hacen la ampliación de la doble calzada y deben respetar los espacios. Vamos a hacer una mesa de trabajo para ver qué podemos hacer,” declaró el alcalde.
Problemas con la Nueva Ubicación
Falta de Acceso y Pérdida de Clientes
Isagen construyó un espacio al lado de la vía para que las vendedoras pudieran seguir ofreciendo sus productos, pero este lugar no tiene una entrada de acceso adecuada para los transeúntes, lo que ha resultado en ventas nulas. Las mujeres esperan que se les permita seguir vendiendo en su ubicación original o que se mejoren las condiciones del nuevo lugar para no perder a sus clientes.
“Esperamos que se nos permita seguir vendiendo nuestros productos. El nuevo espacio construido por Isagen no tiene acceso para los que transitan por esta vía, por lo que las ventas allí serían nulas,” manifestó una vendedora.
La situación de las mujeres vendedoras de pescado en Betulia es un claro ejemplo de cómo los proyectos de infraestructura pueden afectar negativamente a las comunidades locales si no se manejan con sensibilidad y justicia. Aunque se han tomado algunas medidas de compensación, estas no son suficientes para garantizar el bienestar y la seguridad económica de las afectadas. Es crucial que las autoridades locales y las empresas involucradas trabajen juntas para encontrar una solución justa y equitativa.